Hora de accionar

Interesante día. Recordar experiencias vividas, como también conocer otras ajenas, que sin importar que vengan de puros desconocidos sean igual de impactantes.

Hace un par de semanas escuchaba a una amiga hablar del poder de la oración y de lo mucho que le fortalecía. Quede impresionado. Esa noche dormí en total paz. Ella cree en la oración y la grandeza de su fe siempre le abre nuevos y mejores caminos. Una alma noble. Una bella persona y gran ser humano. Dios te bendiga.

En estos días nos vemos afectados por problemas monetarios a causa de falta de trabajo, lo cual genera crisis familiar, violencia verbal y física, abuso de alcohol y drogas, divorcios, entre consecuencias lamentables.

Yo creo en el poder de la oración. Lo creo más cuando visualizo mi trayectoria. Las veces que han habido ángeles tangibles como invisibles. No ha sido una, ni dos, ni seis veces, han sido muchas más.

Cuando se está en crisis mental, depresión o simplemente desbocados, estamos en problemas. Mientras más dilatamos una acción, más amarga será la medicina. Dios es la fuente mayor de fuerza para superar lo que sea, pero Dios también nos envía ángeles de carne y hueso que han sobrepuesto peores pruebas para guiarnos. Cuando Dios te la pone bien fuerte es para que dejes la niñez y asumas como adulto. El sabe que puedes más.

Todos tenemos un adulto confiable, un mentor religioso, un amigo innegable, en fin, alguien esta esperando a que toques la puerta para darte la mano. Mientras más alguien niega necesitar ayuda es cuando más sabe que necesita de esta. Si no es así, ya es un caso clínico que es crónico.

Lo que si entiendo es que una oración sincera y humilde facilitara el camino. Mi amiga me lo recordó aquella noche en La Romana.

No hacer algo al respecto es la peor decisión. Una oración podría traerte la claridad necesaria para saber que hacer y hasta recibir un milagro. Mantén el habito de rezar. Yo lo había perdido por eso quizás se me nubló la brújula. 

Dios te bendiga y éxitos siempre.